Cásate con alguien que no te deje. Visita http://andrearoa.net
El capítulo de Hoy le llamo Cásate con alguien que no te deje y quiero dedicarlo para hablar de las relaciones amorosas y de pareja.
Todos queremos sentirnos amados. Todos soñamos con encontrar esa persona que nos va a hacer sentir mariposas en el estómago y que nos llenará de detalles hasta más no poder. La mayoría de personas sueñan con casarse algún día con su alma gemela y ser felices para siempre. Pero cuando llega la vida real, el matrimonio feliz y de cuento de hadas nunca sucede.
Cásate con alguien que no te deje, y esa persona que nunca te dejará eres tú. El obstáculo más grande de las relaciones no es la falta de comunicación, ni las costumbres distintas de cada individuo de la pareja. El obstáculo más grande que hay es la falta de amor propio.
Las parejas se profesan y se juran amor mutuo, pero esto es totalmente imposible cuando cada uno de los individuos no se ha jurado amor propio antes.
Cásate con alguien que no te deje, cásate contigo. La primera relación y el primer matrimonio al que debes aspirar es contigo mismo. No pretendas que otro venga a llenar los vacíos que yacen en tu alma cuando ni tu mismo reconoces que hay vacíos.
No pretendes que otro te ame tal y como eres, si ni tu mismo lo haces. No pretendas que otro tolere tus errores, tus miedos y debilidades cuando tu mismo te avergüenzas de ellos y no te atreves a encararlos para superarlos.
Cásate con alguien que no te deje pues te reconoce como una fuente infinita de amor y felicidad de la cual nunca se puede desprender. Nadie más va a reconocer ese amor infinito en ti si tu mismo no lo haces.
Las relaciones amorosas y de pareja en la espiritualidad, sólo serán exitósamente felices cuando ambos miembros de la pareja hayan hecho un trabajo interno de amor propio y no estén en busca de que otro les llene los vacíos.
Como todos somos energía, atraemos a nuestra vida aquella misma energía que emitimos. Atraerás a tu vida alguien que también este buscando que le llenes su vacíos y le sanes sus dolores (lo cual es imposible).
Cuando te casas contigo mismo, te comprometes con ser tú la fuente ilimitada de amor y felicidad. Cuando te casas contigo mismo nada ni nadie será motivo de decepción pues sabes que al fin y al cabo tu único compromiso es contigo, y el de esa persona es con ella. Cuando te casas contigo mismo y fortaleces tu amor propio, empiezas a atraer a alguien que esté vibrando a la misma frecuencia que tu. Y entonces ese día podrás tener una relación increíble sin rollos ni asuntos pues nadie espera nada del otro.
Las relaciones no se tratan de que una persona pone un 50% y la otra persona otro 50%; en las relaciones cada uno pone su 100% y juntos construyen algo más grande que ellos mismos.
Chequea el video en mi canal de Youtube y descubre el ejercicio práctico para que planees el matrimonio contigo mismo.
Con amor,
Andrea